Esta vez hablamos de amor. Dos jóvenes que se aman. Se llaman Szymson y Gusta.. Somos de Cracovia y formamos parte de la ZOB, la Organización Judía de Combate. Nos han matado porque luchamos por la libertad. Luchamos por amor.

Gusta Davidson (1917-1943) antes de la guerra

Lo sabíamos antes de la guerra ya, pero nos casamos en 1940, cuando él salió de la cárcel la primera vez. Cuando Szymson fue detenido en enero de 1943, me entregué a la policía. Nuestro juramento era claro: "Nada nos puede dividir." Si vivir esclavos tenía poco sentido, aún menos tenía vivir separados. Nos pusieron en dos prisiones diferentes, pero la distancia no significa nada cuando se ama, como nada significó la tortura. En abril nos condenaron a muerte, pero ninguno de los dos quería morir. De camino al patíbulo logramos escapar. Nos habíamos conocido por casualidad en el pueblo de Bochnia. Volver a estar juntos nos hizo sentirnos aún más libres. El amor era nuestro oxígeno, nuestra primavera. Cracovia parecía aún más hermosa. El enemigo nos daba menos miedo. No podíamos menos que sonreír, porque nuestro amor había conseguido escapar de la muerte. Continuamos luchando.

Szimszon Dranger

En noviembre de 1943, Szymszon fue traicionado y yo con él. Tampoco en ese momento me resistí al arresto. Morir juntos era lo que siempre habíamos querido. Nadie nos puede separar. Las historias hablan de muchas cosas. Las historias de amor, de algo más. Cuando te dicen que el verdadero amor está sólo en los libros, no creas estas mentiras. Son las mismas personas que dicen que siempre debemos obedecer, que no hay nada que hacer, que hay que esperar, que hay que tener paciencia. Pero ¿cómo se puede tener paciencia cuando estás enamorado?

Tomado de aquí